LA PACIENCIA

 



—Los de mi generación teníamos más paciencia —me dijo el hombre girando la silla hacia mí— ¿Tú estás casada o soltera?

—Divorciada.

—Perdona la pregunta, pero lo mismo da —prosiguió él— Las parejas de antes hacíamos por aguantar. Mis hijos están todos separados, ahora es lo normal. Pero antes solucionábamos nuestros problemas en la cama. Sí, hija, esa es la verdad. Y, cuando ya éramos mayores, con sopas de ajo. Nos sentábamos a comer unas buenas sopas de ajo y a recordar el pasado. Y se arreglaba todo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

COHERENCE / PERFECTOS DESCONOCIDOS

PLAYLIST DE CUMPLEAÑOS

RAROLARIUM