AMARILLO


Imagen: "Los girasoles", de Van Gogh

Palabra: sol

Comida: pasta de ají amarillo



Libro: "El alquimista", de Paulo Coelho. Hace muchos años que me leí este libro, pero lo recuerdo con cariño. Trata de un hombre que viaja por el desierto en busca de un tesoro. Si lo visualizo, imagino el calor, las anaranjadas arenas volviéndose doradas bajo la luz del sol, una inmensidad amarilla por recorrer hasta encontrar un cofre lleno de monedas. Un periplo del tipo de "La Odisea", en el que lo importante es el viaje en sí, no la meta, en el que darnos cuenta de que los tesoros no solo son de oro y piedras preciosas, de que la verdadera riqueza está en desenterrar la felicidad en nuestro interior. Entonces sí que brillaremos mucho más que el oro pulido.



Película: "El mago de Oz", de Victor Flemming. Hay películas que vi muchas veces de pequeña y que tienen frases que se me quedaron grabadas. Me acuerdo de "Totó, me parece que ya no estamos en Kansas", de la bruja malvada aplastada por la casa, de las canciones, de todos los personajes, hasta de la secuela con Tic-toc u la gallina Bilina. Pero de lo que más me acuerdo es de la manera de llegar a la Ciudad Esmeralda, siguiendo el camino de baldosas amarillas. En el libro de Frank Baum, Dorothy atraviesa ciudades de muchos más colores, pero en la película se centran en estos ladrillos amarillos. Solo con pensar en ello apetece agarrarse del brazo de unos amigos y cantar "I want to see the Wizard, the wonderful Wizard of Oz"



Canción: "Mi agüita amarilla", de Los toreros muertos. Es obvio que pensé en Los Beatles, pero como no me gustan especialmente, me dejé arrastrar de nuevo a la movida de los 80. Además, en la letra, el agüita de Pablo Carbonell cubre el mundo y lo hace cálido. ¿Qué iba a encontrar más amarillo que eso?


Comentarios

Entradas populares de este blog

COHERENCE / PERFECTOS DESCONOCIDOS

PLAYLIST DE CUMPLEAÑOS

RAROLARIUM