LA CHICA PERFECTA

 

Tengo una amiga que me habla de astrología. Y, aunque no entiendo mucho, llevo como un año leyendo semana a semana cómo avanzan los planetas por el cielo y qué es lo que eso significa. Parece algo mucho más exhaustivo que cuando busco el significado del animal chino cada año, pero no lo es tanto. Los cambios semanales son muy paulatinos.

De hecho, llevo meses leyendo que se está gestando un cambio, que toca dejar atrás una parte que ya no nos sirve, para avanzar sin lastres. (No está tan alejado del año de la serpiente)

Pero el otro día una de las frases me hizo "clic". En líneas generales seguía hablando de soltar y de aceptar que estás dejando esa parte de ti, pero luego ponía esto: "El sol en géminis quiere explicarlo todo. La luna en piscis, en cambio, nos pide que soltemos sin necesidad de entender".

Y para mí ahí esta el quid. Tengo claro lo que estoy soltando, pero me resistía a dejarlo ir sin un porqué, sin una razón para no luchar por ello, viviéndolo como una pérdida. Pero es que muchas veces en la vida no existe ningún porqué, simplemente las cosas pasan. E igual que acepto las sorpresas que aparecen con una sonrisa y sin cuestionarme que hayan llegado a mi vida, pues igual con lo que se va y me deja menos carga.

No darle vueltas a posibles multiversos que no existen. Aceptar lo que hay. Pensar menos. Vivir más. Simplemente ser. Sin intentar ser perfecta.

Disfrutar, por ejemplo, de esas maravillosas conversaciones astrológicas, literarias, educacionales, musicales, sexuales, vitales y de toda la gente bonita que me quiere con mi imperfección. Disfrutar de que Alaska cante siempre himnos con los que bailar y reafirmarme. Porque como Aitana, ahora no quiero ser la chica perfecta.