SENBAZURU

Existe una leyenda japonesa que dice que si haces mil grullas de origami, podrás pedirle al espíritu de la grulla lo que desees. Esta leyenda es conocida en todo el mundo gracias a Sadako Sasaki, una niña que vivía en Hisoshima cuando cayó la bomba atómica y desarrolló una leucemia por la radiación. Una niña hospitalizada en su misma habitación se la contó y le enseñó a hacerlas con papel. Sadako comenzó a hacerlas día y noche, esperando pedir al espíritu que curase su enfermedad. Cuando no tenía papel, utilizaba envoltorios de medicamentos y cualquier otra cosa que pudiera servirle. Para cuando terminó las mil grullas, los médicos le dijeron que le quedaba poco tiempo de vida. En lugar de desanimarse, Sadako continuó haciendo grullas para poder pedirle al espíritu que no hubiera más guerras. También las hacía para regalárselas a otros pacientes y que tuvieran esperanza. Sadako Sasaki murió a los doce años de edad y fue enterrada junto a mill grullas de origami que sus compa...