YULE

 

Hoy es el solsticio de invierno, cuando comienzan las celebraciones de Yule.

Esta fecha señala el principio del invierno, así que es un momento de recogimiento. Por delante tenemos doce días para pasar con la familia, disfrutando de la comida abundante y compartiendo risas, historias y recuerdos, tiempo de disfrutar del hogar.

Algunas de las tradiciones actuales derivan de los nórdicos. El árbol adornado en casa es una representación del Ydgrassil, lo mismo que el tronco de navidad de chocolate (sobre todo si le dibujas símbolos celtas) y hasta Papá Noel es una adaptación de Joulupukki, el viejo que sustituye a la cabra de Yule dejando regalos, que a su vez representa a las cabras de Thor, una ofrenda que no podía morir.

Además, el 21 de diciembre es la noche más corta del año. Desde mañana, cada vez anochecerá un poquito más tarde, y en el norte de hace siglos, era un símbolo de que la vida triunfa un año más sobre la muerte, que caminamos hacia estaciones más prósperas. 

Si tenéis la suerte de tener chimenea, es el momento de encenderla para ayudar a vencer al frío y esparcir las cenizas que queden por la tierra, para hacerla fértil. Y si no, podéis encender una vela y dejarla en la ventana para atraer a nuestra casa esa luz que nos arrastra a la primavera.

Sea como sea, espero que os llegue la parte simbólica de estas fiestas, y que el fuego de ese sol prometido reconforte vuestros corazones tanto como una taza de chocolate caliente y brille para iluminar a los vuestros.

Disfrutad.